Una de mis amigas más graciosas creó el personaje de "Berta". Berta es la típica compañerita de mis charlas de cine y escuela de espectadores de teatro. Es una señora con mucho dinero, que aprovecha toda ocasión para criticar, opinar, felicitar a actores, cuestionar a directores y hablar de su relación con cualquier espectáculo. Quiero contarles que en estas tierras ¡también encontré a Berta!. Me morí de ganas de ser una de ellas opinando después de cada charla post proyección del festival de cine de Locarno, pero pueden quedarse tranquilos porque me contuve y mi paciente esposo no tuvo nada que lamentar.
Nos fuimos el viernes 7 de Agosto a la noche a Locarno, ciudad a 300 km. de Ginebra, en Suiza, Ticino, el único cantón dónde se habla italiano. En Suiza 64% de la población habla alemán, 20% francés y 7% italiano. En otro momento volveremos para pasear por Ticino (Lugano, Locarno, Ascona, Lago Maggiore, etc.), pero esta vez fuimos exclusivamente para aprovechar al máximo 2 días del festival de cine.
Nuestra experiencia en festivales es escasa, pero para variar, estos chicos suizos, destacaron en excelente organización. Un mes antes averigüé cómo participar y al final sólo tuve que preocuparme de sacar pases diarios para los días que íbamos. Una vez en el festival, pudimos ver todas las películas que quisimos apareciendo en la sala media hora antes. Entre otras cosas, había buses gratuitos para llevarte de un cine a otro, bicicletas disponibles para alquilar y salas de cines de 3000 personas. Lo más difícil fue conseguir hotel, terminamos en uno bastante caro, pero resultó ser muy cómodo y estar muy bien ubicado. El programa completo de películas estuvo disponible en internet unos diez días antes del comienzo del festival, así que pude elegir las películas y aprovechar al máximo los dos días.
Algo que también lo venimos viendo en Europa desde el primer día, pero en este festival ya llegó a extremos irrisorios, es la flexibilidad del idioma. Todas las películas estaban en su idioma original con un doble subtitulado. La prioridad de idiomas era francés, inglés, italiano y luego alemán, los subtítulos en inglés siempre estaban presentes así que no tuvimos ningún problema. Eso no quitaba que hubiera presentadores que hablaran en cualquiera de los cuatro idiomas y distinta gente contestaba en distintos idiomas, ¡pero todos entendían todo!. Nosotros siempre pescábamos algo, excepto cuando hablaban alemán. Era muy gracioso cuando todos se reían de algo dicho en alemán y nosotros la veíamos pasar.
La diva del festival como todos los años fueron las proyecciones nocturnas en la Piazza Grande. Las películas que vimos ahí no fueron las mejores, pero la experiencia de una pantalla de 24 x 4 metros junto a 8000 personas, es única.
El festival estuvo organizado en diferentes secciones, muy bien elegidas para cubrir diferentes gustos y edades. No faltaron películas de manga, cine suizo, homenajes, documentales, películas de directores muy jóvenes y la más importante, la sección de películas de la competencia internacional. Yo me incliné a esta última sección, porque sólo yendo 2 días de los 10 que duró el festival, supuse que la competencia iba a incluir las mejores películas.
Les paso a contar lo que vimos, en orden de gusto:
País de octubre, USA: agárrense de lo que puedan antes de ver esto. Un documental de una familia real “típica” americana, con problemas nombrados (algunos por primera vez) y discutidos a la cámara de la manera más directa, humana y cruel posible. Desarrolla una idea muy interesante, la imposibilidad de escribir tu propio libreto y repetir siempre los mismos errores de la familia.
Saludos del bosque, Suecia: otro documental, de gente que habita en un pueblito sueco. Está filmado de una forma muy original, y la fotografía y la música son hermosas. Una de esas películas para relajarse y disfrutar, yo la vi el domingo a las 9 de la mañana y quedé como una seda por el resto de la semana.
Los famosos y los duendes de la muerte, Brasil: hermosa fotografía de un pueblo muy deprimente del sur de Brasil. Los actores, casi todos adolescentes, son excelentes. La música es muy buena también, pero es muy triste. Te llega la tristeza del pueblo y de cada uno de los habitantes. El director un pirado muy joven que se apareció con un traje verde esmeralda, toda la onda.
Sueño el mundo el viernes, Italia. Imagínense “Gomorra” mechada con gente cantando. Antes que la descarten, tengan en cuenta que la música viene muy bien para bajar la tensión. En ese sentido se parecía a “Bailarina en la oscuridad”.
La rebelde, Francia: Michel Piccoli y su nieta adolescente rebelde, no mucho más que eso (que no es poco). La fotografía de los paisajes de Normandia me dieron muchas ganas de ir a conocer.
La desaparición de Julia, Suiza: comedia deliciosa suizo alemana, aunque todos los actores eran alemanes. Primera vez que veo en el cine los buses, supermercados, etc. que frecuento ahora, muy extraño. Trabaja el monstruo de Bruno Ganz, con eso ya la película se salva, pero los diálogos y personajes son muy obvios.
Cómplices, Francia: un "tiler" de policías buenos, con mucha plata puesta encima. Hasta se eligieron un policía francés con un aire a Al Pacino!
Dentro de lo que me perdí, participó en la competencia una película argentina de Santiago Loza, La Invención de la Carne. La ganadora fue una película china, Ella, una china
La verdad que no tengo idea la importancia de estas películas como para saber si van a llegar al circuito comercial, de hecho ni los directores sabían (era una pregunta muy común de Berta). Pero si se llegan a cruzar con alguna se las recomiendo, me parecieron interesantes.
Sin el glamour que puede tener Cannes o cualquiera de los festivales más famosos, este festival me pareció una oportunidad excelente para los pobres mortales como nosotros de ver películas de todas partes del mundo. Eso ya implica una riqueza enorme, y también nos puede dar la oportunidad, por qué no, de ser testigos de nuevos estilos o nacimientos de esos directores o actores que dejan una marca.
¡Perdonen que las fotos no son muchas!
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